miércoles, 31 de diciembre de 2014

Menstruando sobre Arjona

La irritación se nos vuelve piel en aquellos momentos, en esa semana sangrienta donde cualquier cosa nos molesta. ¿Cómo podrían ellos comprender tal desbarate hormonal? No es nuestra culpa, nuestro cuerpo nos empuja a ello, somos víctimas y presas de nuestros sentimientos, de las hormonas, del sueño mensual de nuestra biología de darle forma a alguien más, sueño que la mayoría de las veces no es compartido por nuestro cerebro y nuestros cuidados, al ser rechazado por nuestra parte racional, todo nuestro cuerpo nos demuestra su tristeza, nuestra traición, intenta sublevarse y demostrarnos nuestro error provocándonos un intenso y sórdido dolor, llorando sangre.

Este texto tiene alrededor de un año y medio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario